No hace falta gastar dinero para esto, basta con materiales reciclables u objetos que tengamos cerca para poner a flote la imaginación. Con trozos de cartón, papel, pinturas, tijeras y pegamento podemos hacer figuras de dulces, calabazas, murciélagos y más. ¡Incluso podríamos decorar las puertas con caras graciosas!
¿Qué tal si nos divertimos en la cocina con nuestros hijos y hacemos una competencia de galletas y pasteles con formas divertidas?
Aquí te mostramos algunas ideas para que te inspires y puedas crear tus propias decoraciones: